En nuestra aula adaptada, los niños/as exploran, experimentan y se mueven libremente. Desarrollan habilidades motoras fundamentales que les permitirán adaptarse con éxito a su entorno.
Emocional, cognitivo, neuromotor y creativo: A través de actividades lúdicas y significativas, ayudamos a los niños a conocerse mejor, a pensar de forma crítica y a expresar su creatividad.
Fomentamos la expresión artística a través de la música, baile y pintura, estimulando el lenguaje artístico y actividades sensoriales.
Los niños/as ponen en práctica sus aprendizajes a través del juego y la experimentación en los diferentes ambientes del aula, estimulando su curiosidad y fomentando el trabajo en equipo.
Nuestras propuestas pedagógicas se fundamentan en las últimas investigaciones en neurociencia, garantizando que nuestros alumnos aprendan de manera eficaz y duradera.
Nos preocupamos por cada niño/a y su familia. Ofrecemos un trato cercano y personalizado, con diferentes talleres, información diaria y flexibilidad horaria. Además, ofrecemos orientación en temas como la alimentación y el sueño.
Ofrecemos una primera inmersión en la lengua inglesa a través de canciones, juegos y rutinas diarias, despertando su curiosidad por otros idiomas.
Ofrecemos un espacio cálido y acogedor donde los niños se sienten seguros y protegidos. A través de técnicas de mindfulness, promovemos la atención plena y el bienestar emocional.
Desarrollar su autonomía: Fomentamos la independencia en todas las áreas, desde la alimentación y la higiene hasta la resolución de problemas.
Conocerse a sí mismos: A través de actividades como el mindfulness y la exploración de las emociones, ayudamos a los niños a construir una imagen positiva de sí mismos.
Aprender jugando: Combinamos el juego libre con actividades dirigidas para estimular su curiosidad y creatividad.
Un enfoque integral: Trabajamos todas las áreas del desarrollo infantil: cognitiva, física, social y emocional.
Un ambiente acogedor y seguro: Donde los niños se sienten libres para explorar y aprender.
Introducción a hábitos saludables: Alimentación equilibrada, descanso reparador y rutinas de higiene.
Desarrollo psicomotor: Actividades que favorecen la coordinación, el equilibrio y la fuerza.
Mindfulness: Técnicas de relajación y atención plena para mejorar su bienestar emocional.
Inglés: Primeros contactos con el idioma a través de juegos y canciones.
Inteligencias múltiples: Actividades diseñadas para estimular todas las capacidades de los niños.
Educación emocional: Reconocimiento y gestión de las emociones.
Aprendizaje basado en ambientes: Temas transversales que fomentan la investigación y la colaboración.
Información diaria a las familias: Comunicación fluida y transparente.
Flexibilidad de horario: Adaptación a las necesidades de cada familia.
Orientación personalizada: Apoyo en temas como el destete, la alimentación complementaria, etc